Este contenido está en lectura fácil.Plena inclusión Aragón adapta a lectura fácil una guía de la UCA para hacer contratos de alquiler de vivienda
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- El documento, que ya está disponible para su descarga, permite a las personas con dificultades de comprensión lectora ser más autónomas en la toma de decisiones en relación con un derecho básico, como es el acceso a la vivienda
Zaragoza, 22/12/2022. Plena inclusión Aragón ha adaptado a lectura fácil para la Unión de Consumidores de Aragón (UCA) una guía para hacer cognitivamente accesibles los contratos de alquiler de vivienda.
Esta iniciativa, financiada por la Diputación Provincial de Zaragoza, surgió después de que la UCA detectase que muchas personas encuentran dificultades para comprender el contenido de los contratos de alquiler. Este documento busca ayudar a estas personas a ser más autónomas en la toma de decisiones en relación con la vivienda.
La guía es en realidad un contrato tipo de alquiler de vivienda, solo que escrito en lectura fácil. Este documento puede descargarse en las webs de la UCA y de Plena inclusión Aragón y, próximamente, en la de Gobierno Fácil del Gobierno de Aragón. El documento permite rellenar los huecos con los datos del arrendador y del arrendatario y tiene perfecta validez legal para la redacción de un contrato de alquiler de vivienda.
La lectura fácil es un método estandarizado que recoge un conjunto de pautas y recomendaciones relativas a la redacción de textos, al diseño y maquetación de documentos y a la validación de la comprensibilidad de los mismos, destinado a hacer accesible la información a las personas con dificultades de comprensión lectora.
Uno de los principales colectivos beneficiarios de la lectura fácil es la población con discapacidad intelectual o del desarrollo, para la que trabajan Plena inclusión Aragón y sus entidades asociadas. Pero este método diseñado para dotar de accesibilidad cognitiva a documentos y entornos también beneficia a buena parte del resto de la ciudadanía que presenta dificultades de comprensión lectora, como las personas mayores con deterioro cognitivo, aquellas que lo padecen tras un accidente o enfermedad o los extranjeros con poco dominio del idioma, por citar solo unos ejemplos.
La validación final del documento redactado lectura fácil es la clave para considerar que el mismo se ajusta a las normas que rigen esta forma de escritura, ya que de dicha fase siempre se encargan personas con dificultades de comprensión, que señalan aquellas partes del texto que no comprenden y, con apoyos, deciden una redacción más comprensible.
En el caso de Plena inclusión Aragón, de la validación se ocupa la comisión Creando Espacios Accesibles, integrada por personas voluntarias con discapacidad intelectual, que cuentan con el apoyo de profesionales especializados en accesibilidad cognitiva. Esta comisión ha adaptado documentos para numerosas instituciones públicas y privadas. Por ejemplo, gracias a un acuerdo con el Departamento de Justicia del Gobierno de Aragón, ha trasladado a lectura fácil sentencias de modificación judicial de la capacidad de obrar (antiguas incapacitaciones); o, durante la pandemia, se encargó de hacer comprensibles los decretos que regulaban las restricciones a la movilidad, el uso de la mascarilla o los consejos para evitar contagios de covid-19.
En esta ocasión, y por encargo de la UCA, Plena inclusión Aragón ha podido contribuir a hacer más comprensible un derecho básico de ciudadanía, como es el acceso a la vivienda.